El abrazo más esperado, el de un hermano.

Uno de los acontecimientos más dolorosos que me tocó vivir en mi vida, fue la retirada de un amigo del alma, una retirada dolorosa porque las situaciones profesionales nos hacían vernos cada día, cada equis horas, y ya no había ni siquiera un saludo de cortesía, tan sólo cuando por casualidad nos encontrábamos de bruces.. Dolía, cuánto dolía por no comprender como habiendo sido hermanos de sangre, contando y viviendo tanto, una mala acción mía, se llevo tanto.. causando tanta separación y distanciamiento. Todo lo entendí mas tarde, cuando me quedé a solas, cuando me retiré a sentir el porqué de todo acontecimiento en contacto directo con la naturaleza, conmigo mismo y con los demás sin juicios ni prejuicios, sin más que la providencia y nuestra disposición. En ese largo peregrinar que tanto nos hace ver y sentir al que a ello se dispone.

El término Fe vendría a explicarlo todo, esa palabra antiquísima, que nosotros indudablemente nos la llevamos a asociar a las religiones y creencias, esa que viene de un término griego que significaba a la par tres bellas palabras y las tres se siguen aunando en ella, Confianza, Perseverancia y Seguridad, esas que me hacen sentir que las llevo tanto tiempo como puedo recordar en mi interior, y que me fructifican sin dar crédito en las relaciones sociales y personales que me caracterizan y a las que tanto valor doy en mi día a día, en mi caminar.

Llevaba ya dos semanas caminando desde Creus hacia Finisterre cuando me sentí desconectar, cuando no eres muy consciente ya del día de la semana que es, de cuántos días llevas caminando, cuanto te queda, donde dormirás mañana qué necesitarás, ya te envuelve el aquí y ahora, la naturaleza, la sencillez de hablar, obrar y sentir simplemente, con humildad, con cualquiera, aceptar lo poco que venga con gratitud y confianza, con una tierna y confiada sonrisa. Así tuve que aceptar parar por una lesión seria en mis piernas, en mis espinillas, lesión que casi no me dejaba andar y decidí parar a descansar un día en el maravilloso lugar de Montserrat, el monte serrado, con la Moreneta, la virgen negra. Anduve un día de descanso en sus preciosos miradores, dejando que la energía del lugar me llenara de sentimiento y allí, allí me senté  a escribir.. los destinatarios venían conmigo desde hacía ya mucho tiempo, uno fue mi reciente fallecido tío Gabriel donde escribí una bonita carta llamada «Pacto entre Caballeros» y el otro fue a este amigo, amigo del alma que se distanció de mí sin aún saber porqué ni como.

El estar subido en la ruleta del hamster no nos deja darnos cuenta de que nuestra verdad no es la que prima, no es la verdad absoluta, allí me dí cuenta de qué ocurrió y como fue todo, yo era su amigo, yo sólo tenía que haberme ofrecido a ayudar, no tenía que haber pedido tanta explicación como hice, ni obrar como obré, queriendo como un dictador implantar mi verdad,  porque interfería en el periodo evolutivo de consciencia de otra persona, y a cada persona le llega lo que le tiene que llegar para crecer, evolucionar.  Pero así lo hice, y cuántas lágrimas e incomprensiones me tocaron vivir, porque ese amigo del alma, esa persona tan buena gente como podáis imaginar, se seguía llevando tan bien como siempre con todos, menos conmigo.. y yo me creía en lo cierto, la verdad era mía. No hay forma humana de echar una mano a quien no se quiere dejar ayudar. Todo continuó y llegó la aceptación, lo respeté y lo abracé en mis mejores pensamientos, visualizaciones y en mi largo caminar.

En aquella carta le pedía disculpas, si, me arrodillaba y le decía que no lo había visto así como hasta ahora, y que lo sentía, pero yo también estaba absorto en mitad de un mundo que no nos deja ni tan siquiera respirar. En aquella carta le decía que lo quise, lo seguía queriendo y lo iba a querer toda mi vida, porque sabía bien de qué material estaba hecho, ese material del que algunos somos capaces de someter nuestra salud por la de los demás. En aquella carta le daba las gracias, por tanto bueno que dejó, sigue dejando y dejará en vi vida y en las personas que lo rodeamos, porque es un verdadero encanto como persona, profesional y un ejemplo en todo lo que se ponga a hacer. Y por último en aquella carta en papel, sellada en Montserrat sobre el 17 de octubre del reciente pasado año.. le contaba que lo amaba, sí, hiciera lo que hiciera en esta vida yo iba a estar al salto si me necesitaba, si en algo podía ayudarlo, porque me debo a personas que tienen el corazón tan grande y tan lleno de sentimientos buenos.. porque no juzgo nada de lo que nadie pueda hacer, porque todos tenemos unos zapatos que tan sólo nosotros hemos calzado y no sabemos nada para indicar con tan solo un dedo.

Llevo en Almería casi tres semanas ya, hay mucho por hacer aquí, no pretendía estar tanto tiempo, pero entre muchos motivos, la salud y algún papel me retuvieron. Pero empezó el año y esperando a un amigo a desayunar, esta mañana, la semilla de la fe, aquella carta desde Montserrat y todo lo bueno que llevo dentro, empezaron a germinar.. Esta persona a quién tanto eché de menos, se presentó delante de mí con los brazos abiertos, hacía ya casi tres años que no lo tenía así de cerca, y acongojado, con dos lágrimas en mis ojos, abrí mis brazos y me dejé abrazar y dar la bienvenida al corazón de este hermano del alma que tanto llevaba sintiendo su falta.. ha sido un buen inicio de año, sigo la luz, pero a veces duele. Lo que no podemos es sufrir por ello, tenemos que aceptar y dejar lo mejor de nosotros sin que llegue el desaliento, yo lo he atraído todo lo que he podido y ahora, ahora lo tengo en mis brazos, de nuevo en mi corazón y en mi presente.

Vuelvo a estar empapado en lágrimas, y por fin no dejo que se pasen estos momentos sin dejar de plasmarlos para si por casualidad alguien se ve reflejado, a alguien pueden dar aliento, consuelo o apoyo.. aquí los tenéis, aquí me tenéis..

Estoy muy agradecido, muchísimo. Sois tantos los que tanto habéis aportado en mi vida, que me debo a ello, es mi sentir, sin compromiso ni obligación, disfruto haciendo llegar a estos deditos, estos sentimientos que salen de mi corazón y pasan por un filtro de percepción para haceros llegar a sentir, tan sólo un poquito de lo que siento yo..

Gracias Juanma, te amo, hermano.

Qué gran incio de año, que estupenda continuidad de vida, gratamente vivida.

Imagen. Presentando mis respetos a Montserrat y su energía.

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