Desde Sevilla con amor..

image

Carta de una amiga del alma que vuelve a O Couso tras un año de su primera visita. Tan emotiva que quise compartir en el blog.
Gracias Sol, volvemos a vernos pronto.

Hola queridos amigos:

Me pedís, que os cuente que me llevo a O Couso y porque quiero volver, es como pedirme que traduzca el lenguaje del corazón, algo tremendamente difícil, porque es una asignatura que no se enseña en las escuelas y yo, aunque intento aprender, aún la suspendo constantemente.

Después de un año, no hay ni un solo día que no recuerde ese bendito lugar, o que hable de él con alguien y poco a poco voy entendiendo porque llegué hasta allí.

No reniego de nada de lo que me tocó vivir, porque sé que forma parte del papel que vinimos a hacer a este mundo, pero hasta donde me llegan los recuerdos, siempre sentí que todo podía ser de otra manera, si juntos nos esforzábamos para cambiarlo. Esta idea, imposible de compartir con los que me rodeaban, me hizo pensar a veces, que quizás no era más que un inocente sueño para no aceptar la realidad que me rodeaba. Hace algunos años todo cambió y en mi camino encontré personas que pensaban como yo y la esperanza empezó a ser mi compañera. Entre ellas, se encuentra Emilio Carrillo, al que escuche hablar del proyecto y desde entonces, todo fue como una fuente de energía que me dirigía en volandas a conocerlo. Desde el primer instante en que entre por su rústica puerta de madera, vi claramente que la Providencia me hacia un gran regalo, comprobar que mi sueño se estaba forjando para convertirse en realidad.

Es mucho lo que aprendí sobre mi y sobre los demás durante mi semana de convivencia con vosotros, siendo sin duda una de las experiencias más felices de mi vida. Soy consciente que es un poco tarde para disfrutar plenamente de todo lo que será O Couso en un futuro, pero necesito volver cada vez que pueda y vosotros me lo permitáis, para ser coherente conmigo misma y colaborar con mi pequeño grano de arena, en construir ese mundo que deseo para los que me seguirán y de paso recargar mente y espíritu de todo lo que necesito para vivir donde me corresponde….. en mi hogar y con mi familia.

No podéis imaginar lo feliz que me hace poder decir a mis nietos, que O Couso no es ningún cuento imaginario de su loca abuela, sino un nuevo mundo que ellos podrán seguir construyendo y donde serán plenamente felices si deciden libremente formar parte de él algún día.

Al igual que el año pasado, cada día me encuentro más emocionada pensando que pronto podre abrazaros, pero mientras tanto os digo de corazón Gracias Gracias Gracias..

Soledad Aguilar. Sevilla.

Deja un comentario